Este es un relato de garra y fuerza, de cómo dar el 110% cuando es necesario, de superar las adversidades por grandes que sean, es la historia de la primer victoria del legendario Atlético San Pancho Cachondo.
A finales del 2003, a mis compas, la mayoría compañeros de la prepa, y a mi se nos ocurrió entrar en un torneo de futbol rápido para fomentar el compañerismo y bajar la panza en la mayoría de los casos.
Así formamos un equipo, el Atlético San Pancho Cachondo, nombre que por cierto se le ocurrió al Bebo, autonombrado DT, el Sexy diseñó el logotipo y las camisetas, yo tomé el número 3, llamado a escribir páginas llenas de gloria en el futbol sonorense.
Así empezamos nuestro andar en el futbol rápido, el Carrión, el Rito, el Mota (portero cotizado por otros equipos), el Sexy, Cheche, el Canty, el Valencia, el Güicho, el Papol, el Vilchez, más agregados de ocasión.
En nuestro primer partido, con equipo completo y porra nutrida, las panchitas, en un desastre de cambios y un equipo nervioso perdimos 12-8, ahí el Mota se estrenó como portero evitando una mayor humillación. Yo jugué escasos 2 minutos al final con mas pena que gloria, me marcaron 2 manos y fui castigado en la congeladora dejando al equipo en inferioridad numérica (cabe aclarar que en mi vida había jugado fut, de hecho deportivamente sólo fui estrella en un equipo infantil de beis).
Así fueron pasando nuestros partidos nocturnos en la cancha del Mariachísimo, mucha porra, mucho escándalo… pocos goles. Siempre íbamos mínimo 12 personas para jugar en 6 posiciones, por lo que siempre fuimos un desmadre en rotación así como lo táctico, no es por echarle pero el DT no sabía lo que hacía (kiuboles Bebo).
Por todo lo anterior no era de extrañarse los malos resultados, después de 7 partidos nunca habíamos podido estar en ventaja siquiera, sólo un empate que perdimos en shootouts. En un juego tuvimos un resultado humillante, delante de toda nuestra porra, con el partido 8-0 en contra entre al final, nomás para correr un rato, y tuve la jugada que marcaría la mi historia futbolística. En un desborde por la banda del hermano del mota, salieron los defensas y el portero para quitarle la bola o achicarlo, sin embargo en un esfuerzo sobrehumano filtra la bola para que yo quedara sólo sobre la línea de gol ante una portería vacía, me engolosino y trato de sacar un disparo potente (estaba en la línea de gol solo debía pone la pierna en el camino de la bola) y abanico para la decepción de la multitud (la perriña había nacido), fin del partido, 8-0 marcador final, y la decepción del equipo. Para ese partido yo ya me había especializado en algo mi juego, era el Paco Palencia del equipo, corría mucho, estaba en todas partes, podía jugar cualquier posición, pero nunca podía tener el balón en las piernas, eso sí y poco recordado por parte de mis amigos, pasaba bien el balón (insertar risas).
El siguiente partido lo jugamos en sábado, 18 de octubre si recuerdo bien, a las 8 de la noche por lo que, por el horario poco halagador (había que pistiar) y el magro resultado en el último partido, tuvimos una deserción masiva de jugadores, de los 12 regulares fuimos 7, y no tuvimos porra. Si han jugado o visto futbol rápido sabran que es un deporte demandante, necesitas una banca nutrida. Así que jugamos con el Mota en la portería, el Vilchez, y el Sexy en la defensa, el Cheche como medio defensivo, el Carrión en toda la cancha, el Valencia y el Canty en la delantera, y yo de multiusos por el que se cansara, mayormente en la delantera y en la banca, ah y gritándole al árbitro. En un principio si sentimos al equipo contrario encima, pero el Vilchez y el Sexy estaban haciendo un trabajo impecable, en un contragolpe el Carrión sacó un pase al canty que se los llevó por velocidad, 1-0, por primera vez en el torneo nos fuimos al frente. En ya controlados en la defensa, pudimos hacer más juego en equipo, valencia anotó, 2-0, así acabo el 1er tercio. Yo entraba a ratos, para darle descanso a todos, el Carrión trataba de que yo estuviera arriba, viendo que yo me quitaba la marca naturalmente, sin embargo nunca pude recibir un balón, a la fecha no se como, si embargo al estar enfrente presionaba la salida del equipo contrario, así robaba varios balones. En el siguiente cuarto, el otro equipo al tener más gente, estaba más descansado por lo que nos barrieron en ese periodo, 2-2 al entrar al último tercio. Sin embargo los ánimos los estaban en alto, a pesar de que las piernas no daban para más, fuimos al frente con todo, así el Cheche llegando de media distancia mete un tiro cerca del poste venciendo al portero 3-2, y por último el Valencia (medio cayéndose) a pase del Canty anota el 4-2 final, en los últimos minutos resistimos con todo el embate final del Irreal Madrid (asi se llamaba). El festejo como era de esperarse fue grande, de hecho el poco público que estaba ahí nos aplaudió ( síndrome del pepe el toro).
Así obtuvimos nuestra primera victoria, ya sabíamos como ganar y no nos íbamos a detener ahí, era el inicio de una era en el futbol rápido hermosillense.
Dato adicional: al terminar el partido nos fuimos a una fiesta donde andaba la demás gente, al llegar, todos sudados con neutras camisetas del equipo, les contamos lo sucedido, al resto del equipo y a la porra… nadie nos creyó. Hasta el siguiente partido con el standing publicado nos creyeron.
Así formamos un equipo, el Atlético San Pancho Cachondo, nombre que por cierto se le ocurrió al Bebo, autonombrado DT, el Sexy diseñó el logotipo y las camisetas, yo tomé el número 3, llamado a escribir páginas llenas de gloria en el futbol sonorense.
Así empezamos nuestro andar en el futbol rápido, el Carrión, el Rito, el Mota (portero cotizado por otros equipos), el Sexy, Cheche, el Canty, el Valencia, el Güicho, el Papol, el Vilchez, más agregados de ocasión.
En nuestro primer partido, con equipo completo y porra nutrida, las panchitas, en un desastre de cambios y un equipo nervioso perdimos 12-8, ahí el Mota se estrenó como portero evitando una mayor humillación. Yo jugué escasos 2 minutos al final con mas pena que gloria, me marcaron 2 manos y fui castigado en la congeladora dejando al equipo en inferioridad numérica (cabe aclarar que en mi vida había jugado fut, de hecho deportivamente sólo fui estrella en un equipo infantil de beis).
Así fueron pasando nuestros partidos nocturnos en la cancha del Mariachísimo, mucha porra, mucho escándalo… pocos goles. Siempre íbamos mínimo 12 personas para jugar en 6 posiciones, por lo que siempre fuimos un desmadre en rotación así como lo táctico, no es por echarle pero el DT no sabía lo que hacía (kiuboles Bebo).
Por todo lo anterior no era de extrañarse los malos resultados, después de 7 partidos nunca habíamos podido estar en ventaja siquiera, sólo un empate que perdimos en shootouts. En un juego tuvimos un resultado humillante, delante de toda nuestra porra, con el partido 8-0 en contra entre al final, nomás para correr un rato, y tuve la jugada que marcaría la mi historia futbolística. En un desborde por la banda del hermano del mota, salieron los defensas y el portero para quitarle la bola o achicarlo, sin embargo en un esfuerzo sobrehumano filtra la bola para que yo quedara sólo sobre la línea de gol ante una portería vacía, me engolosino y trato de sacar un disparo potente (estaba en la línea de gol solo debía pone la pierna en el camino de la bola) y abanico para la decepción de la multitud (la perriña había nacido), fin del partido, 8-0 marcador final, y la decepción del equipo. Para ese partido yo ya me había especializado en algo mi juego, era el Paco Palencia del equipo, corría mucho, estaba en todas partes, podía jugar cualquier posición, pero nunca podía tener el balón en las piernas, eso sí y poco recordado por parte de mis amigos, pasaba bien el balón (insertar risas).
El siguiente partido lo jugamos en sábado, 18 de octubre si recuerdo bien, a las 8 de la noche por lo que, por el horario poco halagador (había que pistiar) y el magro resultado en el último partido, tuvimos una deserción masiva de jugadores, de los 12 regulares fuimos 7, y no tuvimos porra. Si han jugado o visto futbol rápido sabran que es un deporte demandante, necesitas una banca nutrida. Así que jugamos con el Mota en la portería, el Vilchez, y el Sexy en la defensa, el Cheche como medio defensivo, el Carrión en toda la cancha, el Valencia y el Canty en la delantera, y yo de multiusos por el que se cansara, mayormente en la delantera y en la banca, ah y gritándole al árbitro. En un principio si sentimos al equipo contrario encima, pero el Vilchez y el Sexy estaban haciendo un trabajo impecable, en un contragolpe el Carrión sacó un pase al canty que se los llevó por velocidad, 1-0, por primera vez en el torneo nos fuimos al frente. En ya controlados en la defensa, pudimos hacer más juego en equipo, valencia anotó, 2-0, así acabo el 1er tercio. Yo entraba a ratos, para darle descanso a todos, el Carrión trataba de que yo estuviera arriba, viendo que yo me quitaba la marca naturalmente, sin embargo nunca pude recibir un balón, a la fecha no se como, si embargo al estar enfrente presionaba la salida del equipo contrario, así robaba varios balones. En el siguiente cuarto, el otro equipo al tener más gente, estaba más descansado por lo que nos barrieron en ese periodo, 2-2 al entrar al último tercio. Sin embargo los ánimos los estaban en alto, a pesar de que las piernas no daban para más, fuimos al frente con todo, así el Cheche llegando de media distancia mete un tiro cerca del poste venciendo al portero 3-2, y por último el Valencia (medio cayéndose) a pase del Canty anota el 4-2 final, en los últimos minutos resistimos con todo el embate final del Irreal Madrid (asi se llamaba). El festejo como era de esperarse fue grande, de hecho el poco público que estaba ahí nos aplaudió ( síndrome del pepe el toro).
Así obtuvimos nuestra primera victoria, ya sabíamos como ganar y no nos íbamos a detener ahí, era el inicio de una era en el futbol rápido hermosillense.
Dato adicional: al terminar el partido nos fuimos a una fiesta donde andaba la demás gente, al llegar, todos sudados con neutras camisetas del equipo, les contamos lo sucedido, al resto del equipo y a la porra… nadie nos creyó. Hasta el siguiente partido con el standing publicado nos creyeron.
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NOTA: cuando yo fui el dt ya era un equipo ganador
EL BEBO